La administración tributaria es el conjunto de instituciones del Estado encargadas de cobrar los impuestos y controlar que las personas y las empresas cumplan con sus obligaciones tributarias. En el Perú, la principal entidad es la SUNAT, que se ocupa de recaudar el dinero, fiscalizar a los contribuyentes y aplicar sanciones cuando alguien incumple. Su función es asegurar que el Estado tenga los recursos necesarios para financiar los servicios públicos.